Las lentes del objetivo.

Cuando se realiza una fotografía, la luz entra en la cámara en un breve instante, pasando primero por el objetivo. El objetivo se encuentra compuesto por lentes situadas una tras otra y en un orden bien definido.
Un objetivo puede ser muy sencillo y contener sólo una lente. O, puede ser más complejo y tener un gran número de lentes en diversos grupos.
Las cámaras réflex utilizan objetivos muy voluminosos y muy pesados. En las cámaras digitales, las lentes y el objetivo son más pequeños.
Las lentes del objetivo, están destinadas a transmitir la imagen real de un objeto al plano focal. El sistema óptico de las lentes se encuentran en una posición, forma y dimensión determinadas.
Los objetivos fotográficos pueden cubrir ángulos de campo que van desde los 5º a los 180 º.
Los objetivos se clasifican en función del su ángulo de campo:
* Normales, con ángulo de 45 º.
* Teleobjetivos, con un ángulo inferior a los 45º.
* Gran angulares, con un ángulo superior a los 45º
La luminosidad

Las características de un objetivo se diferencian por dos parámetros: La luminosidad y la distancia focal.
La luminosidad: (abertura del diafragma)
Es la cantidad de luz que puede llegar a entrar a través de la lente frontal de un objetivo. Con mucha luminosidad en un objetivo, se pueden realizar buenas imágenes aunque haya poca luz. La exposición también depende de la cantidad de luz que pasa a través de las lentes de nuestro objetivo durante un tiempo determinado.
La abertura es el diámetro del diafragma situado en el interior del objetivo. Cuanto mayor sea, más cantidad de luz llegará a la superfície de la película, en un tiempo determinado.
Por tanto la
Luminosidad de un objetivo ó número f, es el cociente entre su distancia focal y el diámetro de su abertura.
El tamaño de la abertura viene indicado por una serie de números (f) marcados en el anillo del objetivo, denominados diafragmas o puntos de diafragma
La abertura del diafragma

Existe una escala universal de aberturas, que se basa en unas unidades denominadas "pasos" o "números f/" (hago notar que debe utilizarse la f minúscula)Los valores de la escala son los siguientes:
f/1, f/1.4, f/2, f/2.8, f/4, f/5.6, f/8, f/11, f/16, f/22, f/32, f/45 y f/64. Los números crecen a medida que la abertura se hace menor, por tanto f/5.6 es más pequeña que f/4 pero más grande que f/8.
Cada paso dobla o reduce a la mitad la cantidad de luz que entra por el objetivo.
Por ejemplo con una abertura de f/16 la película recibe el doble de luz que con una de f/22 pero la mitad que con f/11.
Un número (f) más bajo, indica una abertura mayor, y un número (f) más alto, indica una abertura menor.
La distancia focal
Distancia Focal: Es la distancia en milímetros entre el centro óptico y la superficie de la película o sensor de la imagen, cuando ésta se encuentra proyectada.
Los objetivos de distancia focal larga, acercan el objeto por su ángulo de campo más estrecho.
La profundidad del campo.
En la profundidad del campo intervienen tres factores: La abertura del diafragma, la distancia del motivo y la distancia focal del objetivo.
Profundidad del campo: La profundidad de campo es el rango de distancia en el cual los objetos en una foto se ven nítidos.
La profundidad del campo, siempre aumenta cerrando el diafragma. Según algunos manuales de fotografía, se precisa que, con una abertura media del diafragma ( normalmente de 8 y 11 en las cámaras analógicas), se obtienen las fotos más nítidas. Esto no quiere decir que esta regla pueda aplicarse a los objetivos más pequeños de las cámaras digitales.
Otra regla teniendo en cuenta la profundidad del campo, antes de realizar una fotografía, deberá centrarse donde se indica la zona de nitidez del sujeto.
La profundidad de campo varía con el tamaño de la abertura del lente, la distancia entre la cámara y el sujeto y la distancia focal del lente. La profundidad de campo es mayor a medida que:
1- El tamaño de la abertura del lente decrece.
2- La distancia al sujeto aumenta.
3- La distancia focal del lente decrece.
En algunas tomas necesitaremos la máxima profundidad de campo posible.
El diagragma
El diafragma: Está compuesto por unas pequeñas laminillas metálicas, imbricadas entre sí en el interior del objetivo. Estas, forman un orificio regular que determina el diámetro del haz luminoso y por tanto la intensidad de luz que tendrá el plano focal.
El diafragma, es el que controla la cantidad de luz que atraviesa el objetivo y tambíen determina la extensión de la profundidad del campo.
Algunas combinaciones de abertura y velocidad dan lugar a una exposición equivalente, es decir que en muchas ocasiones la imagen o película se encontrará expuesta a la misma cantidad de luz. Un diafragma muy abierto y una velocidad de obturación elevada nos darán una profundidad de campo escasa y una abertura más pequeña y una velocidad de obturación más lenta nos darán un profundidad de campo mayor.
La velocidad de obturación
La velocidad de obturación: Cuando pulsamos el disparador de la cámara, en realidad lo que hacemos es accionar el obturador. Como ya hemos visto, el obturador suele ser unas cortinillas situadas delante del negativo, las cuales, al abrirse, dejan pasar la luz que impresionará la película.
Cuando el tiempo de obturación aumenta o disminuye, el tiempo de exposición de la película de imagen aumenta o disminuye de forma similar al ajuste del diafragma, que deja penetrar dos veces más o menos luz con cada graduación.
Para captar con nitidez motivos en movimiento hay que recurrir a una velocidad alta de obturación, que dependerá de factores como la velocidad del objeto y la distancia a la que nos encontremos...
Si el motivo viene hacia nosotros o se aleja, necesitaremos una velocidad más lenta que se cruza el encuadre. Debemos situarnos de forma que todos estos factores nos favorezcan. Sin embargo el factor que más nos condicionará a la hora de escoger la velocidad de obturación será la luz. En condiciones de luz escasa podemos aprovechar las pausas naturales de los objetos en acción.